rodeada de ti,
observada a todo momento por el número 7:
obsesiva compulsión hacia
tu fuerte presencia.
Te veo y tengo la certeza de ser perseguida
por todo níveo coleóptero que encuentro.
En el príncipe y en el mendigo
en el ganador y el perdedor...
Hasta en el inicio de la primavera
encuentro tu azul presencia.
Y en la indecisión del agua
por caer o no llover
y en el viento que trae a mi
el aroma que te envuelve.
Pero es entre la belleza del ocaso
y el dolor del alba
donde de un modo mas intenso
centras tu acecho
mi dulce guerrero.
1 comentario:
El amor, es una guerra cruel y despiadada. En la que todos salimos heridos y nadie gana. Felicidades por la alegoría, hermosa
Publicar un comentario